¡Prepara tu casa que viene el Señor!

Aquí estoy María y José, este tiempo suele estar lleno de nostalgia pero quiero ver mas allá de las añoranzas que suelen amenazar la esperanza del corazón.

Enséñenme a vivir la alegría que brota de dentro para poder llenar de esta alegría a los que viven en soledad y abandono.  Quiero ser instrumento de buenas noticias, Amén.

Pero el ángel les dijo: «No tengan miedo. Miren que les traigo buenas noticias que serán motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy les ha nacido en la Ciudad de David un Salvador, que es Cristo el Señor.
(Lucas 2, 10-11)

Me alegro en el Señor con toda el alma y me lleno de júbilo en mi Dios, porque me revistió con vestiduras de salvación y me cubrió con un manto de justicia, como el novio que se pone la corona, como la novia que se adorna con sus joyas.

(Isaias 61,10)

Este tiempo ha sido difícil y complejo… muchas personas se han visto orilladas a vivir en soledad, aislamiento y marginación por diversas circunstancias. Muchas de estas personas las vemos tocar la puerta pidiendo hospedaje en nuestro corazón, piden nuestro tiempo y cariño porque necesitan ser tomadas en cuenta, buscan una sonrisa, un saludo…

Transmitamos la alegría que viene de dentro, de la certeza de que Dios está a nuestro lado aunque no tengamos con quien brindar y a veces ni a quien darle un abrazo, ¡Dios está! ¡Dios se encarna!

Y eso llena todo de sentido.

Señor, hazles sentir tu compañía a los que viven en soledad.

Te pedimos también por aquellas personas que olvidan a sus seres queridos por considerarlos carga o estorbo, tócales su corazón para que vayan a su encuentro y los acojan…

Señor, te pedimos por los que se deprimen en este tiempo de Navidad, sánalos con tu amor y disfruten con su familia y amigos. 

Padre Nuestro, Ave María y Gloria…

Humildes peregrinos, Jesús María y José

Mi alma os doy y con ella mi corazón también.

Afuera

 

1. En el nombre del cielo, os pido posada,
pues no puede andar mi esposa amada.

2. No sean inhumanos,  tennos caridad
que el Dios de los cielos se los premiará.

3. Venimos rendidos desde Nazaret; yo soy carpintero de nombre José.

4. Posada te pide, amado casero,
por solo una noche, la Reina del Cielo. 

5. Mi esposa es María, es Reina del Cielo
y Madre va a ser del Divino Verbo.

6. Dios pague Señores, su gran caridad
y los colme el cielo de felicidad.

 

Adentro

 

1. Aquí no es mesón sigan adelante
yo no puedo abrir no sea algún tunante. 

2. Ya se pueden ir,  y no molestar
porque si me enfado los voy a apalear.
 

3. No me importa el nombre déjenme dormir pues ya les he dicho que no voy a abrir. 

4. Pues si es una reina quien lo solicita
¿cómo es que de noche anda tan solita? 

5. ¿Eres tú, José? ¿ Tu esposa es María?
Entren peregrinos, no los conocía. 

6. Dichosa la casa que alberga este día
a la Virgen Pura la hermosa María

 

Todos 

Entren Santos Peregrinos, Peregrinos,
reciban este rincón,
aunque es pobre la morada, la morada,
os la doy de corazón.

Cantemos con alegría, alegría
Todos al considerar,
Que Jesús, José y María
Nos vinieron hoy a honrar.

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